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martes, 19 de junio de 2012

LOS LIRIOS DE FRANCIA # ELLEN ALPSTEN

Hola a todos.

Vuelvo a vosotros para hacer algo que detesto profundamente, pero que es necesario para dotar a este pequeño sitio virtual de un mínimo de credibilidad y rigor. Hoy vengo a hablaros de una novela que no me ha gustado nada: "Los lirios de Francia", de Ellen Alpsten. Comenzamos ya si os parece.

Ficha técnica.

Título: Los lirios de Francia. 
- Autora: Ellen Alpsten.
- Género: Novela histórica.
- Editorial: Star.
- ISBN : 9788493575533.
- Formato: Tapa blanda con solapas, 286 páginas.
- Año de publicación: 2005.
- Precio: 4 € (precintado).

Personajes.

- Jehanne de Girac: Dama de compañía de la Reina de Francia, casada con Pierre de Giac, un noble del reino a pesar de no haber aportado dote al matrimonio por su extraordinaria belleza. Nos irá informando de todos los acontecimientos mediante las cartas que le envía regularmente a su madre.

- Isabel de Baviera: Reina de Francia y regente del reino durante la enfermedad de su marido. Ha dado a luz doce veces, pero aún sigue siendo una mujer hermosa, además de no haber perdido un ápice de la majestuosidad que tenía cuando llegó a París sin apenas saber francés a contraer matrimonio con el   rey francés. En muchas ocasiones recuerda los días felices al lado del rey, que para ella son un bálsamo para seguir soportando que, la interminable guerra contra los ingleses esté degenerando en una guerra civil entre las grandes familias nobles de Francia.

- Yolanda de Anjou: Prima de Isabel, viuda del duque de Anjou y la peor enemiga de la Reina. Su única ambición es colocar a alguno de sus hijos en el trono de Francia. La Historia nos dice que lo conseguirá.

Esta vez tan sólo os dejo tres personajes de esta novela, que es muy coral, pero estas tres mujeres son las que sostienen toda la trama. Hay toda una pléyade de secundarios, entre los que cabe destacar el propio Rey inglés,  el duque de Borgoña o el señor de Armagnac, por no hablar de Jehanne de Arc.

Contraportada.


Una sangrienta historia de amor y poder en la Francia medieval. 
No hay amor sin odio, quien no lo tenga en cuenta merece morir.

No soplan buenos vientos para Francia, el rey Carlos se encuentra sumido en un estado casi vegetativo, víctima de una terrible enfermedad, y su mujer debe hacerse cargo del gobierno del país con sólo el apoyo de unos cuantos fieles partidarios. Odiada por el pueblo llano, su vida se ha convertido en una lucha sin cuartel contra un grupo de nobles levantiscos que comparten con ella sus ansias de poder y su falta de escrúpulos. Su peor enemiga, Yolanda, duquesa de Anjou, pretende valerse de su parentesco con la familia real para asegurar la ascensión al trono de sus hijos.
Por si fuera poco, extramuros se libra una larga y cruenta guerra que ha asolado el país. Las cortes de París y el Loira se aprestan para asestar el último golpe, sin reparar en el daño que puedan ocasionar a sus gentes. El conflicto se ha extendido por todas partes, desde los campos de batalla hasta las alcobas de palacio y muchos caballeros y cortesanos pagarán caras la pasión y la fidelidad que sienten por ambas mujeres.
Amoríos, celos, intrigas... La historia siempre se repite. Esta vez, sin embargo, cuenta con el pulso ágil y a la vez refinado de Ellen Alpsten, quien nos muestra cómo la enemistad y el odio puede conducir a un país hasta el borde del abismo.

Argumento.

 Francia se encuentra sumida en la eterna guerra de los Cien Años, pero el rey Carlos no está en condiciones de dirigir las batallas contra el odioso vecino inglés, ya que una terrible enfermedad lo mantiene en un estado de postración que le conduce a sufrir ataques de locura, con períodos de lucidez lo suficientemente frecuentes y prolongados como para impedir que sea inhabilitado por el Consejo del Reino, que le ha buscado una amante para que la Reina pueda verse libre de sus ataques de ira, en más de una ocasión llegó a agredirla. Isabel de Baviera es la regente del reino de Francia hasta que el Delfín (heredero al trono) alcance la mayoría de edad. El pueblo la conoce con el sobrenombre de la reina maldita.

 Cuando la historia  comienza, la amante del rey está embarazada de seis meses, y este embarazo, lejos de ser un problema, resulta convertirse en un bálsamo para el enloquecido monarca. Resumiendo, nació una niña que fue enviada (siguiendo el consejo de Yolanda de Anjou) con una familia  humilde procedente de Orleans para que la criase. El apellido de su padre adoptivo era de Arc. Decía la profecía que el reino francés sería destruido por una mujer y llevado a la gloria por una doncella de Orleans.


 El hijo menor de la reina se compromete y se casa con la hija de Yolanda de Anjou y, en un primer momento, no tiene posibilidad alguna de reinar en Francia algún día, ya que tiene dos hermanos mayores y, por tanto, con mayores derechos a heredar el trono del país... pero cuando mueren, el príncipe se convierte en heredero, pero la reina maldita lo deshereda diciendo que es un bastardo, como venganza porque él renegó de ella como madre.


Ya no sé qué más contaros de esta novela, la trama son las intrigas palaciegas en sí, las puñaladas traperas por un quítame allá esas influencias sobre el que puede mandar en un país dividido entre armagnacs y borgoñones, las muertes convenientes para que la arpía de turno cumpla sus objetivos... vamos lo mismo de siempre, pero peor.


Mi opinión personal.

En este tema hay mucha tela que cortar, así que vamos por partes:


- La novela: No me ha gustado nada. Me ha parecido lenta, insustancial y aburrida. Mira que es difícil que una novela ambientada en la época medieval no me guste, pero esta que hoy os traigo no sólo lo ha conseguido, sino que me ha recordado todos y cada uno de os motivos por los que dejé de leer novelas ambientadas en intrigas palaciegas.


- La autora: Era totalmente desconocida para mí hasta que descubrí esta novela. En la contraportada de la novela puedo ver que nació en Kenia en 1971, pero que actualmente reside en Londres junto a su marido y su hijo y que ha trabajado como periodista especializada en economía en Blommberg TV.  Comenzó su andadura como escritora de ficción en el año 2000 con una novela titulada "La zarina"  que ahora mismo no me apetece descubrir.


- Trama y personajes: La trama no me ha parecido excesivamente interesante, al estar ambientada en la guerra delos cien años, un período histórico que me gusta mucho, creí que disfrutaría con las luchas de poder, las batallas por el control tanto de los territorios como de las voluntades por parte de la regente del reino de Francia, una mujer que por fuerza habría tenido que armarse de valor y enfrentarse a todo y a todos para imponer su voluntad. Nada de esto ocurre aquí, la guerra es una mera anécdota, de hecho los ingleses aparecen más bien poco, demasiado poco para tener dominado una gran parte del territorio francés.


En cuanto a los personajes han supuesto otra decepción para mí. Me han parecido planos y sin el menor carisma, empezando por la Reina maldita y acabando por su propio hijo. Una de las pocas que, en este sentido, se salva en parte de la quema es Jehanne de Giac, ella es el personaje que mejor conocemos, de ahí que haya decidido colocarla en primer lugar, ya que a lo largo de la novela no nos queda claro quién es el verdadero protagonista de la trama, además de ser esta mujer la única que parece tener un desarrollo y cambio claros a lo largo de la trama, en ella sí que se ve claramente una evolución  a lo largo de la historia, y nos la va mostrando a través de las cartas que le envía a su madre, en las cuales pasa de ser una mujer "felizmente" casada y con la única ambición de darle un hijo a su marido a una mujer realmente enamorada (de otro) capaz de traicionar a la propia Reina con tal de pasar más tiempo al lado de su amado.


Otro personaje que me gustaría destacar, para bien, es el de Catalina, la hija menor de la Reina Maldita. Ella sí tiene el valor y la sangre fría que parecen faltarle a su madre, de hecho en varias ocasiones, la sorprenderemos regañando a la Reina por su falta de decisión, intentando hacerle ver a su madre que ella es la Reina y que debe hacerse cargo del país sin delegar constantemente en otros que se aprovechan de su debilidad para hacer lo que les da la real gana. Una buena muestra de su personalidad la tenemos cuando  Catalina cree que debe casarse con el Rey de Inglaterra. Una de las primeras frases que aprende en inglés es: Si me tocas, te mato, llegando incluso a esconder en su ajuar una pequeña daga de plata con la que podría cumplir su amenaza.


La mayor decepción para mí en este tema, y ya concluyo, ha sido Jehanne de Arc. Los aficionados a la Historia medieval sabemos el papel fundamental que tuvo Juana de Arco en el resultado final de la contienda, insuflando ánimos a las tropas y poniéndose al frente de ellas cuando era necesario. La autora casi olvida al personaje de la doncella de Orleans llamada a salvar el reino de Francia, con tan sólo un par de menciones cuando es una niña y un capítulo dedicado a su intervención, dejando de lado toda la polémica que se desató en aquella Francia destruida, entre los que creían que era una santa y los que, por contra, pensaban que era el diablo quien hablaba por su boca. Fue quemada en la hoguera acusada de herejía.


- Ambientación y estilo: Nos encontramos ante los puntos más fuertes de la novela, y este es el motivo por el cual he decidido ponerlos juntos.


Ellen Alpsten hace gala de  una prosa muy bella, regalándonos pasajes emocionantes, entre los cuales me gustaría destacar la descripción que nos hace de la Reina, perdida en sus recuerdos, mientras pasea por los jardines del Hôtel - Saint - Paul. Esta fue una de las escasas ocasiones en las que conseguí empatizar con la Reina Maldita, acompañándola en su paseo entre los lirios mientras recordaba los buenos tiempos vividos en aquel mismo lugar cuando aún era feliz con su marido el Rey. Algo que me ha llamado la atención es que, durante toda la obra, la autora intercala frases en francés, que en mi edición se mantienen en ese mismo idioma. Son frases cortas y sencillas que hasta yo, con mis escasísimos conocimientos del idioma galo, he sido capaz de comprender sin problemas.


En lo tocante a la ambientación, es bastante decente sin ser ninguna maravilla, ya que nos encontraremos con fallos clamorosos, como cuando Jehanne de Giac en una de las cartas que le envía a su madre, se queja de que su marido huele a tabaco. Estando como estaban el el primer cuarto del siglo XV, esto es un anacronismo, ya que esta planta fue traída de América por Colón casi un siglo más tarde. Cierto es que este tipo de fallos no son muy abundantes, pero por fuerza se hacen notar, pero en general nos encontramos ante una novela bastante bien ambientada. 


- Edición y formato: Como ya comenté cuando presenté la novela en el blog, la portada me encanta, con esa escena tan típicamente medieval de los nobles divirtiéndose a los pies del castillo. Eso sí, lo único que falta son los salteadores de caminos y los bandidos a sueldo de uno de los dos bandos contendientes en la guerra civil encubierta que asolaba el país, pero claro no habría sido conveniente reflejar esto en la portada de la obra.

El formato es de tapa blanda con solapas, muy cómodo y con un tamaño de fuente más que aceptable, no en vano es la edición gran formato, pero no por eso nos veremos libres de las erratas y faltas de ortografía, que como ya os he contado en más de una ocasión, me desquician especialmente. Esta vez, como casi siempre, consisten sobre todo en tildes puestas donde no deberían o que no están donde sí es necesario. Como digo arriba, esta obra se publicó en el 2005 por lo que dudo mucho que vayan  a sacar ediciones revisadas. 


Recomendación y conclusiones.

Creo que es evidente después de lo ya expuesto que no recomiendo la lectura de esta novela. Me ha parecido sosa y aburrida, sin un protagonista claro y con toda una pléyade de personajes planos y carentes del más mínimo carisma, salvo un par de excepciones. Los buenos son tontos y sufren lo indecible a manos de los malos a los que todo les sale bien en su afán de salirse siempre con la suya. Poco creíble en general.

Ya me despido de vosotros. Como siempre, agradezco visitas y comentarios. Muchos besos shakianos y hasta la próxima.

9 comentarios:

  1. Uy... no me llama nada... este tipo de novelas suele tender a aburrirme y me voy con una mosca, así que imagínate... y si es lenta, peor!

    :***

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  2. Una reseña fantástica. Es, además muy difícil hablar de un libro que no te gusta y lo razonas impecablemente.
    Besos

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  3. Es la segunda reseña que veo de este libro...y las dos lo poneis bastante malo.
    Por cierto muy muy buena reseña.
    Me alejaré de este libro jeje
    Un beso!

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  4. Fíjate que a mí me había llamado la atención cuando me la enseñaste! Pero nada, fuera de mi vista. Casi hasta mejor no aumentar mi larguíiiisima lista de pendientes!
    Besos y espero que tengas más suerte con tu próxima lectura

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  5. Jo, pues en un principio tenía una pinta estupenda pero después de leer tu reseña me da que voy a pasar. Mira que casi olvidarse de Juana de Arco...

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  6. Pues qué quieres que te diga: novela sosa, aburrida, personajes planos... La dejo pasar totalmente. Besos.

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  7. Pues con todo lo que tengo pendiente por leer y a pesar de que de ese periodo no he leído demasiado, voy a hacer caso de tu recomendación y dejarla pasar
    besos

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  8. Pues no conocía la novela, pero con tu reseña ya descarto conocerla totalmente.
    1beso:)

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  9. Yo tengo la costumbre de leer novelas históricas, aunque no me gusten nada, sólo porque me encanta la historia. Pero te entiendo, es cierto que es pesado, y he dejado algunas a medias ya que definitivamente no podía seguir.
    Saludos

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