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domingo, 31 de marzo de 2013

SEMANA DE PASIÓN # 5.

Hola a todos:

Esta es la entrada que clausura la primera Semana de Pasión de Shaka Lectora. Antes de nada, me gustaría dales las gracias a todos los que han tenido a bien acompañarme durante la misma, especialmente a mi querida sevillana Marisa G. de books and co. por hacerme conocer su particular visión de esta semana especial en su ciudad. Como os prometí en la entrada anterior, finalizaré esta semana temática con una galería fotográfica en la que os enseñaré las tallas más representativas de la Semana de Pasión en Salamanca. Para llevar un mínimo orden, las distribuiré por iglesias.

Galería fotográfica.

- Iglesia Convento de San Esteban (dominicos).


Nuestro Padre Jesús de la Pasión.


Santísimo Cristo de la Buena Muerte.


Nuestra Señora de la Esperanza.

- Iglesia de San Pablo (Plaza de Colón).


Nuestro Padre Jesús Divino Redentor Rescatado.


Nuestra Señora de Las Angustias.

Santa Iglesia Basílica Catedral Nueva.


Santísimo Cristo de la Agonía Redentora.


Santísimo Cristo Yacente de la Misericordia.


Nuestra Señora de la Soledad.


La Soledad de la Cruz.


Nuestra Señora de los Dolores (la Piedad).

- Real Colegio del Espíritu Santo (La Clerecía).


Santísimo Cristo de la Luz y Nuestra Señora de la Sabiduría.


Nuestro Padre Jesús Flagelado.


Nuestra Señora de las Lágrimas.

- Iglesia de la Purísima Concepción.


Nuestro Padre Jesús Despojado de sus Vestiduras.

Espero que pronto podamos disfrutar de la que será su compañera en el desfile, María Santísima de la Caridad y del Consuelo.

- Iglesia de San Julián y Santa Basilisa.


Nuestro Padre Jesús Nazareno.


Santo Entierro.
- Iglesias de la Vera Cruz y las Úrsulas.

En este caso, sólo os dejaré las que son mis imágenes favoritas entre las que desfilan desde estos templos. Dejarlas todas convertiría esta entrada en eterna.


Santísimo Cristo de los Doctrinos.


Santísimo Cristo de la Agonía.


Virgen de los Dolores.


Cristo Resucitado.

Bueno, pues ahora sí doy por concluida la semana temática, agradeciendo de nuevo a todos aquellos que habéis tenido a bien acompañarme la atención prestada en estos días. A partir de mañana, Shaka Lectora volverá a su primitivo espíritu literario y reseñador, pero antes me gustaría que os mojáseis y no porque esté lloviendo (otra vez) y me respondáis a una pregunta ¿Cuál de todas esas imágenes que os he puesto más arriba os ha gustado más?.

viernes, 29 de marzo de 2013

SEMANA DE PASIÓN # 4.

Hola a todos:

Hoy vengo a hablaros de la imagen mariana que, sin duda alguna,  más devoción despierta entre los salmantinos. De ahí que en la entrada anterior os la presentara como "la reina de Salamanca". Pensé en esperar a mañana para escribir estas letras, pero viendo el panorama considero harto improbable que podamos verla este año en las calles de la ciudad. Son algo más de las cinco de la tarde y, a estas horas, diluvia en Salamanca, este año el cielo no está dispuesto a darnos ni la más mínima tregua. Os presento, por tanto, a Nuestra Señora de la Soledad tallada por Mariano Benlliure. Como hice ayer, os voy a hacer una crónica del desfile, al que he asistido muchos años.

Datos técnicos.

- Nombre: Nuestra Señora de la Soledad.
- Autor: Mariano Benlliure.
- Ubicación actual: Santa Iglesia Basílica Catedral Nueva.
- Salida procesional: Viernes Santo 00:00 horas.



Desfile procesional: La reina de Salamanca pasea por sus calles.

Cuando aún faltan muchos minutos para la media noche, la Plaza de Anaya ya está abarrotada de gente, deseosa de ver esta bella imagen de María, pero no es hasta las doce en punto cuando los grandes portalones de la Puerta de Ramos se abren para dejar paso a su palio.

¿Cómo recibe la ciudad a esta imagen? Con aplausos, el himno nacional interpretado por la banda de música de Alba de Tormes y una lluvia muy diferente a la que en estos días nos acompaña, ya que está formada por pétalos de rosa.



Lentamente, el trono malagueño en el que desfila María deja atrás la Plaza de Anaya para adentrarse en la Rúa y baja la cuesta de Palominos (dejando tras de ella las fachadas de la Casa de las Conchas y la Clerecía) para, poco después, dar lugar a uno de los momentos más bellos de la Semana de Pasión en esta ciudad, al menos es uno de mis favoritos. 

Baja el desfile por la calle de San Pablo y, a su izquierda, se abre la monumental plaza del Concilio de Trento, con San Esteban al fondo. Mientras el paso que acompaña a María en su discurrir por las calles de la ciudad (la soledad de la cruz) prosigue su camino bajo el puente de Santo Domingo,  la Virgen se para a la entrada del mismo y espera... a que las puertas de San Esteban se abran y, por ellas, asome la otra imagen de palio de la Semana Santa de la ciudad: Nuestra Señora de la Esperanza. Parece que la reina de la ciudad le estuviera pidiendo permiso a la Señora de San Esteban para atravesar el patio de su casa.


Otro bello momento en esta procesión lo encontramos algo más tarde, con la entrada de la misma en la Plaza Mayor. Todas las luces del ágora salmantina se apagan, quedando esta imagen apenas iluminada con su propia candelería (eléctrica) y las velas que portan sus cofrades. En el balcón del Ayuntamiento aguarda paciente Sofía Chieng, una soprano de origen chino interpreta para ella "Ave María".


Tras ese emotivo acto, el desfile se encamina de vuelta a la Catedral por la calle de la Rúa. En el atrio del templo se despedirán hasta el año que viene.

Como ya os he dicho, acompaña a esta hermosa virgen un paso muy moderno. La hermandad decidió incorporarlo a finales de los años 90 dada la enorme cantidad de hermanos de fila que acompañaban a la virgen cada año, que ya entonces superaban ampliamente los 2000. El paso es sencillo, del tipo llamado alegórico, fue  tallado por Vicente Cid y Tomás Monzón y representa a cuatro angelotes sosteniendo la cruz vacía. 


Como ¿curiosidad? os contaré que el año de 1985 fue especialmente trágico para esta imagen. El 30 de marzo de aquel año, unos desconocidos entraron en la Catedral en medio de la noche y robaron gran parte del ajuar de la Virgen, incluyendo la corona que la joyería Cordón realizara en los años 30 del siglo XX. Este hecho reactivó la devoción a María en su advocación a la Soledad, haciendo que el número de hermanos y donaciones aumentase de forma drástica, pudiendo así sustituir los objetos robados, que aún no han sido recuperados.

Breve apunte artístico.

Como ya os dije más arriba, esta bella imagen fue tallada por Mariano Benlliure. En un primer momento la dureza de los rasgos de la imagen disgustó hasta tal punto a los cofrades que se la devolvieron a su autor para que la modificase. La nueva talla, esta que podemos disfrutar en la actualidad, fue más de su agrado, tanto que el imaginero fue nombrado hermano mayor de honor de la cofradía.


Nota final: Cuando acabo de escribir esta entrada no llueve. El cielo nos está dando una tregua que espero dure para poder disfrutar de esta imagen en la calle.

Próxima entrega: Galería fotográfica.

jueves, 28 de marzo de 2013

SEMANA DE PASIÓN # 3.

Hola a todos:

Vuelvo  a vosotros con esta tercera entrega de la Semana de Pasión que está acogiendo este blog en  estos días tan especiales para mí. Hoy llega el turno, como os avisé en la entrada anterior, de un impactante crucificado de estilo gótico que me atrevería a calificar como dolorosamente realista y que, por cierto, es la talla más antigua que procesiona por las calles de Salamanca. Datado en los primeros compases del siglo XVI y atribuido a la gubia del palentino Juan de Balmaseda, hoy os presento al Santísimo Cristo de la Agonía Redentora y a su compañero de fatigas, el Yacente de la Misericordia. 

Crónica de lo que pudo ser y no fue.



Plaza de Anaya de Salamanca. Faltan pocos minutos para la media noche y los allí congregados miramos con preocupación ese cielo negro, sin rastro de luna ni estrellas, el mismo que ha respetado el centenario de Nuestro Padre Jesús Flagelado y nos ha permitido disfrutar de su innegable elegancia, esperando que haga lo propio con el desfile que está a punto de comenzar.

Suenan las doce campanadas en el reloj de la Catedral y, con la puntualidad que les caracteriza, las puertas del templo se abren para dejar paso al Obispo y al alcalde de la ciudad que, en sus discursos, exhortan a los cofrades y a la propia ciudad del Tormes a guardar un escrupuloso silencio. Presidiendo el acto, el crucificado deja entrever su adusta silueta en la Puerta de Ramos.



El cielo de Salamanca parece querer respetar, un año más, este desfile. Sigue oscuro y feo pero no llueve. Aprovechando la aparente bonanza, la procesión se reorganiza en el interior del templo y en pocos minutos, las puertas vuelven a abrirse para dar paso a nuestro particular barrandales, una figura única en la Semana Santa de Salamanca pero muy común en la zamorana, y que no es otra cosa que un cofrade, cargado con dos esquilas (aquí son dos campanas de plata) que abre la procesión llamando al silencio. Tras él, los faroles que sustituyen en este caso a la habitual cruz de guía.


Acto seguido, encontramos a la cantera de la Cofradía, los más pequeños también quieren acompañar a estas tallas en su peregrinar por las calles de la ciudad aunque sólo sea durante un corto trecho. 



Poco después, podemos ver otra de las peculiaridades de esta cofradía: un incensario de plata, inspirado en el de la Catedral de Santiago, que prepara el camino para las imágenes que están por llegar. 


Poco después llega el crucificado, acompañado por la agrupación musical de su cofradía, que interpreta  "llorando a mares" una bonita marcha compuesta expresamente para esta imagen.



Y como no hay dos sin tres, también sale a escena el Cristo Yacente de la Misericordia, al que acompaña musicalmente la banda de música Felipe Espino, que le dedica una marcha especialmente querida por esta cofradía "mater mea". También pudo el Coro Christus dedicarle a esta imagen sus cánticos, frente al Palacio de Anaya como viene siendo tradición en este desfile.



Cuando caminábamos hacia la cercana calle de San Pablo para volver a encontrarnos con las imágenes, nos llevamos una grata sorpresa. Jesús Flagelado aún estaba en la calle y pudimos disfrutar de su bella imagen camino ya de la Clerecía, su hogar.


Todo parecía ir bien, la procesión discurría con normalidad y los allí presentes nos disponíamos a disfrutar de la que sería la primera procesión completa en desfilar en este año pasado por agua, mas el cielo no lo quiso así y pronto comenzó a caer una lluvia fina, constante y  persistente que obligó a la cofradía (cuando el crucificado alcanzaba la plaza de Colón) a tomar la siempre difícil y dolorosa decisión de regresar a casa cuando aún no habían cubierto ni un tercio del recorrido previsto. 

Este año las madres Isabeles se quedaron con las ganas de volver a ver a su señor, no pudieron elevar sus plegarias y peticiones al Cristo que tenía su hogar en este convento hasta la desamortización de Mendizábal. Espero que el próximo año ellas puedan hacerlo y, los demás disfrutemos de estampas como esta, en la que el Cristo de la Agonía Redentora recorre la Plaza Mayor mientras de fondo suena "Saeta".


Breve apunte artístico.

Esta vez lo hacemos al revés. Tras una larga crónica de la procesión, os dejo aquí una breve nota artística sobre este Cristo de la Agonía Redentora. Es de estilo gótico, de un realismo tremendo, atribuido a la gubia de Juan de Balmaseda y está datado a principios del siglo XVI.

Su rostro, de rasgos duros y sin barba, retrata perfectamente la agonía que supone ese cruel castigo que es la crucifixión. Tampoco contribuye a suavizar esa primera impresión esa larga melena de cabello natural que posee ni el resto de su anatomía, larga y enjuta.


A pesar de su nombre, este Cristo ya está muerto. Aunque en esta imagen no se aprecia, presenta la lanzada en su costado derecho.. El paño de pureza, a pesar de ser un añadido posterior, pregona a las claras su antigüedad, siguiendo la sencilla norma que os expuse en la entrada anterior a esta (cuanto más grande, más antiguo).

Esta imagen presenta su pecho hinchado, y esto es una muestra más de su tremendo realismo. Durante la crucifixión, la falta de oxígeno hace que la pleura se inflame, resultando que el torso se hinche, como lo presenta este Cristo.

En lo que se refiere al Yacente que lo acompaña, es una de las imágenes más modernas de la Semana de Pasión en Salamanca. Obra de Enrique Orejudo, fue tallado para intentar suplir la carencia de este tipo de imágenes en la Semana Santa de Salamanca, que no tenía ningún Cristo Yacente hasta entonces. Fue tallado en 1991 y ya ha sufrido una restauración por parte de su propio autor a pesar de su juventud, en la que se procedió a aclarar el tono de su piel y a un vaciado parcial, para tratar de paliar su excesivo peso.



Próxima entrega: Reina y Señora de Salamanca.

martes, 26 de marzo de 2013

SEMANA DE PASIÓN # 2.

Hola a todos:

Vuelvo a la carga con esta segunda entrega de la Semana de Pasión en Shaka lectora. Esta vez me gustaría hablaros de una imagen de Cristo Crucificado que tiene su hogar en la Iglesia de los Capuchinos de la capital del Tormes, perteneciente al estilo barroco y que, en mi opinión, no está recibiendo la difusión que merece su calidad artística, pero aquí estoy yo para intentar paliarlo, al menos en parte. Este Cristo no desfila, desde hace ya muchos años, por las calles de la ciudad debido a su pésimo estado de conservación. Hoy quiero hablaros del Santísimo Cristo de la Agonía, atribuido al escultor y cantero salmantino Bernardo Pérez de Robles, datada aproximadamente en 1671.

Datos técnicos.

- Nombre: Santísimo Cristo de la Agonía.
- Autor: Bernardo Pérez de Robles (atribuido).
- Ubicación actual:  Iglesia de San Francisco, Salamanca.
- Estilo artístico: Barroco.
*- Marcha procesional: Jueves Santo a las 19:45 horas.



Santísimo Cristo de la Agonía.

Creo que es de sobras conocido, aunque nunca esté de más recordarlo, que el arte habla. Sí, le habla a aquel que sea capaz de tomarse el tiempo necesario para escucharlo. Nos habla de los sentimientos de su autor al empuñar la gubia o el buril, de sentimientos porque el ARTE así con mayúsculas es eso, puro sentimiento. Veamos qué tiene que decirnos de sí misma esta bellísima imagen que hoy os traigo (haced clic en ella para agrandarla).




En un primer golpe de vista, nos percatamos de que nos encontramos ante un Cristo Crucificado, de estilo barroco, con una clara inspiración andaluza y realizado, como siempre en estos casos, en madera. Esa misma mirada descuidada delata un pecho limpio de sangre, sin lanzada alguna y unos ojos abiertos que nos dicen que este Cristo aún está vivo.


Una mirada más en profundidad a su rostro nos muestra esa corona de espinas externa, una barba partida tan del gusto del arte barroco y una mirada muy expresiva, vuelta hacia el cielo como pidiendo ayuda a ese Padre al que poco antes reprochaba su abandono pero... ¿soy yo la única que en esa mirada también ve un rayo de esperanza? Yo también noto en ese rostro la consciencia de que, como cantaron anoche mismo en la Plaza Mayor de Zamora la muerte no es el final.



Mención aparte merece el paño de pureza o paño de gloria de esta imagen, uno de los más claros indicadores de su barroquismo. A medida que fueron transcurriendo los siglos y, por ende, los estilos artísticos este indispensable complemento fue disminuyendo su tamaño, quedando reducido en este estilo a casi su mínima expresión ya que, como podemos comprobar en la imagen, deja al descubierto parte de la cadera del Cristo, algo impensable en los estilos anteriores, estando el ropaje en sí cubierto de los angulosos pliegues típicos del arte de aquella época y sujeto a la cadera con una simple cuerda, detalles estos que comparte con el Cristo del Perdón, del mismo autor y  que podéis ver aquí.

A vosotros, ¿os gusta pararos un momento a escuchar lo que vuestra obra de arte favorita tiene que contaros? Probadlo, merece mucho la pena.

Desfile procesional.

Durante muchos años, este Cristo fue la imagen titular de la cofradía que lleva su nombre pero, como os conté más arriba, su pésimo estado de conservación obligó a dejarlo enclaustrado en la iglesia de San Francisco de la ciudad, siendo sustituido por una talla homónima que Damián Villar realizó en 1959 una buena talla, que yo diría inspirada en la anterior, pero de una calidad artística indudablemente menor.



Como os dije arriba, el desfile procesional se realiza en la tarde del Jueves Santo y recorre gran parte del casco histórico de nuestra ciudad, paseando por enclaves estratégicos como la plaza de Anaya o la Plaza Mayor.

Junto a esta imagen desfila también por las calles charras una virgen dolorosa del mismo autor que suplió, a su vez, a la virgen dolorosa de Luis Salvador Carmona.


Nota final: Quizás recordéis que, en mi entrada anterior, denominé a este Cristo como el mejor platero de Salamanca. Esto es debido a que fue precisamente en esta imagen en la que Félix G. Modroño se inspiró para crear el crucificado que apareció en su novela "La sangre de los Crucificados" y cuya lectura os recomiendo.

Próxima entrega: Impacto gótico.


domingo, 24 de marzo de 2013

SEMANA DE PASIÓN # 1.

Hola a todos:

Me gustaría informaros de que a partir de hoy y, hasta el domingo 31 de marzo, shaka lectora echa el cierre literario para dar paso a otra de mis grandes pasiones: la Semana Santa de mi ciudad. Durante estos días, este blog no hablará de libros, sino de arte sacro en las calles, de Cristos góticos paseando frente a fachadas platerescas, de nazarenos sufrientes y vírgenes llorosas. Durante esta semana hablará, en definitiva, de la Pasión y Muerte de Cristo. Arranco ya con esta especie de semana temática hablando de una de mis imágenes favoritas, un precioso Cristo Flagelado que tiene su hogar en el no menos bello Colegio del Espíritu Santo, más conocido como La Clerecía. Permitidme que os presente a Nuestro Padre Jesús Flagelado, surgido de la gubia de Luis Salvador Carmona hace ya más de 250 años.

Datos técnicos.

- Nombre: Nuestro Padre Jesús Flagelado.
- Autor: Luis Salvador Carmona.
- Ubicación: Real Colegio del Espíritu Santo (La Clerecía).
- Estilo artístico: Neoclásico con reminiscencias barrocas.
- Marcha procesional: Miércoles Santo, 21:30 horas.



Creo que el autor de esta extraordinaria talla no necesita ningún tipo de presentación. Si a alguien le apetece conocer su biografía más en profundidad, le sugiero que visite Google, donde encontrará más información y mejor explicada que lo que yo pudiese escribir aquí. Me centraré en su legado, esta maravillosa imagen que podemos ver en las calles de Salamanca cada Miércoles Santo en la tarde - noche.



Nucstro Padre Jesús Flagelado.

La imagen que hoy os traigo está fechada en 1760, habiendo cumplido ya los 250 años de vida. Representa a Jesucristo, justo después de la flagelación, en el momento en el que recoge sus vestiduras.

Una lección de anatomía.

Uno de los motivos por los que este Cristo es tan valioso, artísticamente hablando, es precisamente este: la perfecta definición del cuerpo de la imagen, en la que se distinguen perfectamente todos los músculos, puestos en tensión para realizar el acto de recoger sus vestiduras del suelo, lo que le confiere también una tremenda sensación de movimiento, a pesar de tratarse de una talla, da la impresión de que en cualquier momento, va a erguirse y a vestirse con su túnica.



Otro dato a tener muy en cuenta es la perfección que logró Carmona a la hora de representar, en la espalda de la imagen, la tremenda carnicería que supone la flagelatio romana. Como curiosidad, os diré que sorprendentemente, el autor de esta talla no la concibió para salir en procesión por las calles de Salamanca, sino para que recibiese culto en una hornacina creada especialmente para él y situada en la sacristía del templo que hoy le acoge y que tenía la particularidad de estar recubierta de espejos para poder contemplar esta espalda d la que os hablo.



Os sugiero ahora centrar la atención en el rostro de esta imagen. Su mirada refleja perfectamente el sufrimiento que acaba de padecer, mezclado con la pena de saber que lo peor está aún por llegar. Esta imagen es una verdadera joya artística, se mire por donde se mire.

En los datos técnicos os digo que esta es una imagen neoclásica con reminiscencias barrocas. El entonces recién nacido arte neoclásico se hace notar en la pureza de líneas que emana de todo el conjunto, en la perfecta anatomía de la imagen y en la columna que aparece en segundo término. El estilo barroco, sin embargo, campa por sus respetos en las vestiduras de la imagen, que aparecen llenas de los pliegues angulosos tan del gusto en aquella época. Esa misma tendencia la encontramos en la barba partida del Cristo y en su ensortijada cabellera.

Durante muchos años, esta imagen procesionó en soledad por las calles charras pero, desde 1992, lo hace acompañado por una bellísima imagen mariana que paso a presentaros en seguida.

Nuestra Señora de las Lágrimas.




Es esta una imagen mucho más moderna que la anterior. Fue tallada en 1977 por el imaginero sevillano José Miguel Sánchez Peña y, originalmente, lo hizo para una cofradía gaditana que decidió no quedarse con esta imagen, que finalmente fue donada a la hermandad salmantina por un hermano en 1991, siendo bendecida en la Clerecía el 12 de enero de 1992, siendo en la Semana Santa de este año cuando procesiona por primera vez por las calles de la ciudad.

La Virgen viste saya y manto negros, con fajín en color eminencia, pañuelo blanco en la mano izquierda con el emblema de la cofradía bordado y, en su diestra, porta un rosario del mismo color. Como podéis ver en la imagen, también el adorno floral es en estos mismos colores (blanco y eminencia).



Su rostro es delicado, de facciones redondeadas, alejado por tanto de los cánones de las dolorosas castellanas, pero sus ojos vueltos hacia arriba sí que son típicos de estas latitudes. También podemos ver cinco lágrimas, situadas estratégicamente, que surcan su rostro.

Desfile.

Como ya os he dicho, estas dos imágenes realizan su desfile penitencial el Miércoles Santo, teniendo su salida a las 21:30 horas de la Iglesia de la Clerecía y regresando a ella pasada la media noche. En su recorrido, incluyen los puntos más significativos del centro histórico de la ciudad, como pueden ser el edificio histórico de la Universidad, la Plaza de Anaya o la Plaza Mayor.



Si debo definir esta procesión con una sola palabra elegiría elegante, tanto por la forma de vestir de los cofrades (de negro y eminencia), como por el gusto en los adornos florales pero, sobre todo, me encanta el cómo visten a la virgen, a juego con los hermanos que la acompañan en su peregrinar por la ciudad, llamándome especialmente la atención el precioso manto que viste, negro con ligeros brillos más abundantes en su parte inferior que cuelga ligeramente del anda en la que procesiona. La imagen del Cristo es portada por hombres y la de la Virgen por mujeres, que fueron admitidas como miembros de pleno derecho de la cofradía apenas cuatro años antes del primer desfile procesional de esta imagen.

Los cofrades visten con hábito y túnica negros, capirote, fajín y botonadura en color eminencia, zapato negro con hebilla plateada, calcetín y guantes blancos. Los estatutos de esta hermandad, y esto me gusta mucho, prohíben a los cofrades desfilar cargados con cruces, descalzos o cargados de cadenas. Todos deben marchar en igualdad.

Este año 2013 la procesión modificará su recorrido, acercándose hasta la iglesia de la Vera Cruz, con el fin de conmemorar el centenario de la primera salida procesional de la imagen del Cristo. Mis felicitaciones desde aquí, que sean muchos más.

PRÓXIMA ENTREGA: El mejor platero de Salamanca. A ver si alguien adivina quién es :)